El aceite esencial de Lavanda tiene propiedades calmantes, relajantes y equilibrantes.
Es desinfectante y descongestionante, antiséptico. Muy buena tolerancia en la piel.
SOLO USO EXTERNO
Múltiples usos: puro, en aceite vehicular, en hornillo, compresas, entre otros.
Restaura los estados desequilibrados (cuerpo, mente, espíritu)
Relaja la musculatura.
Ejerce una acción sedante sobre el corazón, calma las palpitaciones.
Alivia el dolor de cabeza.
Alivia el dolor muscular.
Alivia dolores artríticos, reumáticos, calambres.
Coadyuvante en el tratamiento de sinusitis, resfríos, gripe, bronquitis, asma, catarro, tos. Especialmente usada en vaporización.
Es un sedante efectivo, ayuda a conciliar el sueño, incluso en bebes y niños. Se puede colocar una gota en la almohada.